La Asociación Bancaria de Panamá (ABP), fundada el 1 de febrero de 1962, es un gremio sin fines de lucro, cuya misión principal es promover y facilitar el desarrollo de este sector mediante diversas iniciativas y, a la vez, contribuir a fomentar en la población la importancia de que el país destaque en la región por la solidez de su sistema financiero.
La ABP agrupa a bancos públicos y privados, locales e internacionales que operan en la plaza, que este año 2024 suman 40 con licencia general y 13 con licencia internacional. También hay 9 bancos con licencia de oficinas de representación.
Entre sus objetivos principales está defender los intereses de la actividad bancaria, en tanto que la ABP se ha convertido en uno de los puntales de impulso al crecimiento del Centro Bancario Internacional de Panamá.
A lo largo de sus 62 años de historia, ha destacado por ejercer un papel protagónico en momentos trascendentales del país, como fue, por ejemplo, la crisis política y financiera de finales de la década de los 80 o, más recientemente, durante la pandemia del COVID-19, que por casi un año paralizó al mundo.
En ese momento, los bancos adoptaron una serie de medidas de alivios financieros a los consumidores bancarios. Sin duda, los bancos han demostrado que, en momentos buenos como difíciles, son actores clave para la canalización de recursos hacia sectores que promueven de manera directa el desarrollo socioeconómico.
La ABP ha jugado un papel clave en el crecimiento del sector bancario panameño, colaborando con las autoridades gubernamentales y otros actores relevantes para asegurar un entorno financiero estable y competitivo. Ha presentado propuestas y ha ejecutado programas y normas de buenas prácticas que favorecen la transparencia y la solidez del sistema bancario en el país.
Además de su labor promotora de la industria bancaria, la Asociación Bancaria de Panamá, en conjunto con el Instituto Bancario Internacional, fomenta la educación financiera y el desarrollo profesional, brindando nuevos conocimientos tanto a jóvenes de educación media como a profesionales del sector bancario.
En esta línea, una de las actividades más importantes es la realización, durante 29 años consecutivos, del Congreso Hemisférico para la Prevención del Blanqueo de Capitales, Financiamiento del Terrorismo y Proliferación de Armas Masivas, que reúne en la capital panameña a más de 1,200 expertos nacionales e internacionales, autoridades gubernamentales, instituciones financieras y profesionales del sector de la región.
El principal objetivo de este congreso es fortalecer las estrategias de prevención del blanqueo de capitales, financiamiento del terrorismo y proliferación de armas de destrucción masiva, y se ha convertido en un testimonio del compromiso que tiene el sector bancario y el país en adherirse a los más altos estándares internacionales en el manejo de los servicios financieros y en la lucha contra el mal uso que se pueda hacer de ellos.
Con el mismo compromiso, el gremio organiza eventos de gran envergadura como la Cumbre Financiera Internacional de Panamá y el Congreso de Ciberseguridad, Prevención de Fraudes y Seguridad Física. Además, en colaboración con la Federación Latinoamericana de Bancos, se llevan a cabo congresos de relevancia en el sector.
Este tipo de iniciativas, sumado al trabajo mancomunado entre entidades bancarias, autoridades reguladoras y de Gobierno, y una robusta ley que data de 1970 y con el transcurrir del tiempo se ha modificado y fortalecido, es lo que ha permitido a Panamá, con una economía dolarizada, contar con el Centro Bancario Internacional (CBI) más moderno y exitoso en la región, cumpliendo con los estándares de los principales centros financieros alrededor del mundo.
Todas las ventajas ya mencionadas son posibles gracias a la solidez del sistema bancario, la eficiencia y agilidad de los procesos, el abundante acceso crediticio, la seguridad en los sistemas bancarios, la estabilidad y la buena calificación de riesgo país. Además, el país cuenta con bancos de procedencia internacional que operan directamente con otros países de la región, aportando a la competitividad del país.